El año 2009, mes de mayo, le escribí una carta a un buen amigo de Chillán (Chile) sobre el contenido de mono fosfato de amonio, porciento por peso, en un agente extintor químico seco multipropósito.
La carta, como sigue:
En el manual “Fire Protection Handbook” – Sixteenth Edition – National Fire Protection Association – 1986 – Section 19/Chapter 3 – Dry Chemical Agents and Application Systems. – page 19-25, Smothering Action, se lee:
“When multipurpose dry chemical is discharged into burning ordinary combustibles, the decomposed monoammonium phosphate leaves a sticky residue (metaphosphoric acid) on the burning material. The
residue seals glowing material from oxygen, thus helping to extinguish the fire and prevent reignition.”
El autor de este capítulo, Walter Haessler, en este párrafo, explica que cuando se aplica fosfato mono amonio en un combustible ordinario encendido, se descompone, por calor, dejando un residuo pegajoso – ácido meta fosfórico – sobre este.
Este residuo sella el material incandescente, evitando su contacto con el oxígeno extinguiendo así el fuego, evitando la re ignición.
Con lo anterior queda claro que la cantidad de ácido meta fosfórico que se produce, por descomposición por calor, depende del porcentaje por peso de fosfato mono amonio en el agente.
Agentes extintores con 30%, 35%, 40% de contenido de fosfato mono amonio son pobres en lo que a extinción se refiere.
En la medida que se aumenta el contenido del fosfato mono amonio es posible obtener más ácido meta fosfórico por lo tanto se incrementa la habilidad de este agente para apagar fuegos clase A.
La mayor efectividad de un agente multipropósito, base fosfato mono amonio, se consigue con un contenido de entre 70% a 90% de esta sal de fósforo.
Cuando el contenido va mas allá de 85% no se consigue mayor efectividad, pero si se aumenta el precio del agente.
En Chile se piensa que cuando el contenido es de 90% se consigue la máxima efectividad.
Lo anterior no es así.
De hecho, los fabricantes de este agente, en los EEUU, utilizan contenidos de entre 70% y 80%.
Tiempo atrás recibimos una invitación del INN a un seminario llamado “Compita por Calidad o Compita por Precio”, invitación que motivó una reunión con el director de este instituto.
En esta reunión expusimos que sería posible competir por calidad, en el caso de un agente extintor base fosfato mono amonio, si y sólo si la norma sobre este agente exigiere un contenido mínimo por peso.
De no existir un contenido mínimo, sólo sería posible competir por precio.
Lo anterior, sin embargo, no fue considerado por el INN.
Terminé mi carta diciendo que esperaba haber ayudado a aclarar porqué es importante el contenido de fosfato mono amonio en un agente extintor multipropósito.